Como todo registro realizado en el campo de la propiedad industrial, el registro de un Diseño Industrial concede un privilegio de explotación exclusiva a su titular.
En el aspecto potencializador de la economía que se quiere resaltar, se encuentra que particularmente este tipo de registro estimula la investigación en los diferentes campos del conocimiento y de las tecnologías y contribuye ostensiblemente a la expansión de la actividad comercial al impulsar en gran manera la exportación de productos nacionales, por su innovación estética.
Para abarcar de manera entendible el tema, es importante recordar que el diseño industrial se refiere a los aspectos ornamentales o estéticos de un objeto. Un diseño Industrial puede consistir en características tridimensionales, como la forma o la superficie de un artículo o características bidimensionales, como la configuración, las líneas o el color.1
Los Diseños Industriales se aplican a una amplia variedad de productos de la industria y la artesanía, para que gocen de protección deben ser nuevos u originales y no funcionales, es decir, que el diseño industrial es esencialmente estético y que la protección no abarca los rasgos técnicos del articulo al cual se aplica el diseño, no obstante éstos aspectos pueden por medio de patente quedar protegidos.2
Económicamente hablando, el registro de un diseño industrial permite a su titular el aprovechamiento exclusivo durante un término de diez (10) años, lo que le concede una ventaja competitiva en el mercado.
Finalmente, es importante que el empresario nacional reconozca la importancia de proteger mediante el registro los diseños industriales y aproveche este mecanismo de protección de sus creaciones para darle un valor agregado a sus productos y de esta manera incentivar el crecimiento económico de sus empresas.
1 http://www.wipo.int/edocs/pubdocs/es/intproperty/450/wipo_pub_450.pdf
2 http://www.wipo.int/edocs/pubdocs/es/intproperty/450/wipo_pub_450.pdf
